Crisis en el corazón lechero: las históricas Verónica, SanCor y La Suipachense al borde del colapso
El derrumbe del consumo, las deudas impagables y los altos costos de producción empujan al borde del abismo a empresas que durante décadas fueron emblemas de la industria láctea argentina.

El sector lácteo argentino atraviesa uno de sus momentos más críticos en años. En un contexto de consumo interno en caída libre, costos productivos en aumento y una alarmante falta de financiamiento, compañías emblemáticas como SanCor, Lácteos Verónica y La Suipachense enfrentan una situación límite que amenaza con provocar su desaparición definitiva.
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📲 Click AQUÍ El declive no es reciente, pero los últimos dos años agravaron los problemas financieros de muchas empresas. La falta de crédito, el encarecimiento de la energía y los salarios, junto con la sobreoferta de leche cruda y precios finales a la baja, conforman un escenario que desangra a la industria láctea y la deja sin margen de maniobra.
Lácteos Verónica: cheques sin fondo y producción al mínimo
La histórica firma santafesina arrastra deudas millonarias y un nivel de endeudamiento que no deja de crecer. Según datos del Banco Central, acumula cerca de 3.500 cheques rechazados por falta de fondos, equivalentes a más de $12.600 millones. Aunque la empresa logró reanudar parcialmente su actividad tras un acuerdo con el gremio ATILRA, su producción se encuentra muy por debajo de los niveles normales: en la planta de Clason apenas procesa 20.000 litros de leche cada dos días, un volumen mínimo frente a su capacidad instalada.
Los productos de Verónica desaparecieron de la mayoría de las góndolas y, pese a los esfuerzos por reactivar la producción “a fazón” para terceros, la falta de insumos y el endeudamiento con proveedores mantienen a la empresa al borde del colapso operativo.
SanCor: entre los pedidos de quiebra y el intento de reactivación
La cooperativa SanCor, símbolo del sector durante décadas, enfrenta más de 300 pedidos de quiebra y mantiene una deuda superior a $20.000 millones en salarios y aportes sociales impagos. El juez del concurso, Guillermo Vales, invitó a los acreedores a presentar planes de reactivación, una medida inédita para una firma de esta magnitud.
Pese a sucesivos recortes y más de 370 despidos en los últimos dos años, la situación financiera no mejora. Hoy, SanCor apenas sobrevive mediante contratos de producción para terceros, como Elcor, Punta del Agua y La Tarantela.
La Suipachense: acampe, parálisis y deudas millonarias
En Suipacha, provincia de Buenos Aires, la planta de La Suipachense se encuentra prácticamente paralizada. Sus trabajadores llevan más de 60 días de acampe, con salarios impagos desde julio, y la empresa se encuentra al borde del corte de servicios básicos por falta de pago.
Bajo control del grupo venezolano Maralac, la compañía busca desprenderse del negocio, y trascendió que la chilena Lácteos Conosur SA sería la interesada en adquirir sus instalaciones. En su momento de esplendor, la planta procesaba hasta 250.000 litros diarios; hoy, esa cifra cayó a cero. En la comunidad, la preocupación es profunda, dado que la firma es una de las principales fuentes de empleo local.
Una industria que se hunde entre sobreproducción y caída del consumo
A la lista de crisis se sumó recientemente la quiebra definitiva de ARSA (Alimentos Refrigerados S.A.), encargada desde 2019 de producir yogures y postres con la marca SanCor. Su cierre dejó a más de 400 empleados sin respuesta sobre su futuro laboral.
En el panorama general, la combinación de sobreoferta de leche, precios internos en baja y exportaciones limitadas deja al sector en una posición extremadamente frágil. Los valores al consumidor final cayeron entre un 5% y un 10%, reflejando un consumo retraído y la pérdida del poder adquisitivo de la población.
El tipo de cambio y la falta de competitividad externa impiden colocar los excedentes en el mercado internacional, lo que agrava la crisis. Mientras tanto, el “granero del mundo” ve cómo su industria láctea se derrumba, arrastrando décadas de historia y miles de puestos de trabajo.
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