Tensión en el PRO bonaerense: intendentes resisten un acuerdo con La Libertad Avanza y agitan la vuelta de Juntos por el Cambio

La interna del PRO bonaerense atraviesa horas decisivas. Un grupo de intendentes expresó su rechazo al acuerdo con La Libertad Avanza (LLA) en una reunión virtual con el presidente del partido en la provincia, Cristian Ritondo, y abrió la puerta a explorar una tercera vía junto a la UCR y peronistas disidentes, en busca de reflotar la marca Juntos por el Cambio.

Rechazo a ceder lugares y condiciones para negociar

Durante el encuentro por videoconferencia —convocado en la antesala de la reunión clave entre Ritondo y el titular bonaerense de LLA, Sebastián Pareja— varios jefes comunales se negaron a ceder los primeros lugares en las listas de concejales a dirigentes libertarios y exigieron condiciones concretas:

• Que los libertarios en las listas no sean opositores en sus municipios.
• Que se garantice la formación de interbloques oficialistas en los concejos deliberantes.
• Que el PRO tenga derecho a definir qué libertarios integrarían las boletas locales.

“Vamos a darles concejales a los violetas para que después se pongan de acuerdo con el peronismo y nos traben la gestión. Si no hay compromiso, no tiene sentido”, advirtió uno de los participantes.

La fractura expuesta: nombres y posiciones

En la reunión participaron dirigentes de peso como Diego Santilli, Soledad Martínez, Guillermo Montenegro, Ramón Lanús, Pablo Petrecca, Sebastián Abella, Juan Ibarguren, Javier Martínez, Marcelo Matzkin, Diego Reyes, Fernando Bouvier, Jorge Etcheverry y Lisandro Matzkin, entre otros. También asistieron los diputados provinciales Matías Ranzini y Agustín Forchieri, y los senadores Christian Gribaudo y Alejandro Rabinovich.

Mientras Montenegro, Santilli y Lanús impulsan un acuerdo con la Casa Rosada, otros intendentes —vinculados tanto a Mauricio Macri como al propio Santilli— se oponen a la estrategia y cuestionan las condiciones del pacto.

“Son excusas. Si se ofrece el octavo lugar y dicen que piden el primero, es una negociación ficticia”, señaló una fuente interna.

Riesgo de ruptura y resurgimiento de Juntos por el Cambio

Con el cierre de alianzas previsto para el 9 de julio y la elección provincial el 7 de septiembre, las diferencias se intensifican. Ritondo busca contener las tensiones para evitar una implosión partidaria, en un escenario donde el peronismo aparece unificado y competitivo.

“Con el peronismo unido, sería suicida ir separados para sacar un 5%”, advirtió un dirigente cercano a Ritondo.

En ese contexto, varios intendentes promueven la posibilidad de reactivar Juntos por el Cambio en la provincia de Buenos Aires, la coalición que llevó al PRO al poder en 2015, como alternativa a un acuerdo que —consideran— implicaría una “rendición” frente a LLA.

“No es un acuerdo, es una rendición. Se ensañan con los 13 municipios que gobierna el PRO. Nos quieren borrar como fuerza política”, dispararon desde el sector crítico.

El telón de fondo: tensión Macri–Milei

El malestar no se limita al ámbito bonaerense. La relación entre Mauricio Macri y Javier Milei atraviesa un momento crítico, agudizado tras la votación de la ley de movilidad jubilatoria en Diputados, donde el PRO votó junto al kirchnerismo y la oposición tradicional, lo que desde el Gobierno fue leído como un quiebre del respaldo fiscal.

“Javier está recaliente con Mauricio”, confesó un interlocutor cercano al presidente.

Ese clima de desconfianza política nacional se proyecta en las negociaciones provinciales y alimenta la fragmentación interna del PRO.

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